domingo, 10 de agosto de 2025 00:40
Un cardiólogo santiagueño, identificado como José Chávez Espinoza, ha sido acusado de asesinar a su propio hermano, Daniel Enrique Chávez Espinoza, en un crimen motivado por la “codicia” y el deseo de apropiarse de la herencia de su difunto padre. La Fiscalía, a cargo de Hugo Herrera, ha agravado los cargos contra el cardiólogo, imputándolo por homicidio doblemente calificado por alevosía y ensañamiento, informó el medio El Liberal de aquella provincia.
Según los detalles de la investigación, el crimen se perpetró entre el 5 y 6 de julio de 2023. El fiscal Herrera sostiene que José drogó a su hermano con medicamentos para sedarlo y dejarlo en un estado de indefensión. Posteriormente, manipuló el teléfono de la víctima para enviarse mensajes a sí mismo y a un tío, con el fin de asegurarse la posesión de bienes de la herencia, como una cochera y una camioneta Toyota SW4, además de un monto de dinero.
Los restos de Daniel Enrique fueron hallados calcinados el 6 de julio en el paraje La Victoria, Dpto. Banda, y los peritos descubrieron en el lugar restos de un posible líquido acelerador. La investigación también reveló que el acusado vendió un automóvil Toyota Corolla de la herencia por una suma de $3.000.000 y manipuló el celular de su hermano para transferir conversaciones relacionadas con los bienes.
Durante la indagatoria, José Chávez Espinoza se ha declarado inocente de todos los cargos. Sin embargo, la Fiscalía basa su acusación en un conjunto de pruebas contundentes, que incluyen datos extraídos de su celular, copias de la declaratoria de herederos, evaluaciones psicológicas, y pericias telefónicas y forenses, lo que lo posiciona como el único sospechoso de este brutal asesinato.