Jaldo: «Esta obra consolida los lazos de fraternidad entre tucumanos y catamarqueños»

El gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, encabezó este jueves la inauguración de un nuevo tramo de la Ruta 307, que conecta Amaicha del Valle (Tucumán) con Santa María (Catamarca). Durante el acto, el mandatario tucumano destacó el esfuerzo conjunto entre las provincias del norte para sostener obras clave pese al difícil contexto económico nacional. Acompañado por su par de Catamarca, Raúl Jalil, y autoridades locales, Jaldo remarcó que esta obra no solo mejora la conectividad vial y el turismo, sino que «consolida los lazos de fraternidad entre tucumanos y catamarqueños».

“Cuando vamos al gobierno nacional con Raúl y otros gobernadores, nos dicen que no hay plata y que no hay obras para el interior. Por eso hoy más que nunca, con recursos propios, seguimos adelante con obras de infraestructura. Lo hacemos para generar trabajo digno y dar respuesta concreta a nuestras comunidades”, expresó el mandatario.

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Jaldo agradeció especialmente a los trabajadores de la Uocra y al secretario general David Acosta, y puso en valor la persistencia de las comunidades de Tafí del Valle, Amaicha, Colalao, El Mollar y Santa María: “Ellos fueron quienes soportaron la desatención de muchos años. Pasaron gobiernos y parecía que nadie veía el deterioro de esta ruta. Pero el tiempo llegó”.

Obras en contexto de crisis y federalismo activo

En medio de un escenario nacional que describió como “uno de los más complejos de la historia argentina”, Jaldo insistió en que las provincias del interior deben tomar las riendas de su destino: “Hoy sobran las decisiones políticas a favor de la gente, aunque falten los recursos. Y esta obra lo demuestra. Estamos recuperando el 100% de la Ruta 307 en los Valles Calchaquíes con fondos propios y planificación”, señaló.

En su discurso, Jaldo también defendió una postura firme pero institucional frente al gobierno nacional: “Nos tildan de dialoguistas. Y lo somos, pero dialogamos para traer lo que por ley le corresponde a Catamarca y Tucumán. Nadie se salva solo en esta Argentina. Vamos a defender a quienes nos votaron, pero gobernamos para el 100% de los tucumanos y catamarqueños”.

Un mensaje de esperanza

A lo largo del acto, el gobernador hizo énfasis en la necesidad de no caer en el pesimismo, a pesar de la crisis: “Tantas veces encendemos el televisor y parece que el mundo se viene abajo. Pero no debemos perder las esperanzas. No debemos bajar los brazos. Tenemos la obligación de seguir gestionando y trabajando juntos por nuestra gente”.

El acto culminó con un llamado a la unidad regional y al compromiso colectivo para sostener las obras y el desarrollo: “Lo que no hagamos los tucumanos por los tucumanos, nadie lo hará desde afuera. Esta es una muestra clara de lo que somos capaces cuando trabajamos en equipo”, concluyó.