El Gobierno confirmó este miércoles que llegó a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional luego de las reuniones que mantuvieron el ministro de economía, Luis Caputo, y el Jefe de Gabeinte, Nicolás Posse esta semana.
Los puntos del acuerdo serán informados esta tarde por el vocero presidencial Manuel Adorni. Funcionarios de Economía ultiman detalles con directivos del organismo antes de el anuncio oficial.
En el Gobierno aseguraron que más allá de la “buena noticia” por el acuerdo, “no hay nada para festejar” porque el riesgo sigue “latente” por la compleja situación económica. “Ahora necesitamos que salga la ley ómnibus”, indicaron.
Por el momento en la Casa Rosada evitan hablar del alcance del acuerdo y del esquema de desembolsos que implicaría.
El Poder Ejecutivo negoció durante los últimos días la séptima revisión técnica del acuerdo firmado en marzo de 2022 y que tras una serie de modificaciones e incumplimientos de metas por parte del Gobierno de Alberto Fernández y de su ex ministro de Economía Sergio Massa quedó incumplido el año pasado. La gestión kirchnerista y Massa pusieron en marcha un «plan platita» electoral que fue en contra de todo lo que el había prometido al FMI.
La intención del Gobierno de Milei ahora es la de establecer nuevas metas de déficit y acumulación de reservas, conseguir waivers (dispensas) del directorio del FMI por los objetivos no alcanzados en la última parte del 2023, y destrabar al menos un desembolso pendiente de USD 3.300 millones para reforzar al Banco Central.
En principio prometieron déficit cero y un fuerte ajuste que incluye aumentos de tarifas para la luz, el gas y el agua para achicar el monto de los subsidios.
Caputo aún trabaja este miércoles al mediodía junto con funcionarios del Banco Central para cerrar el acuerdo final con el Fondo. La plata llegaría en varias semanas luego de la aprobación final del directorio del organismo.
La misión del Fondo es encabezada desde la semana pasada por el subdirector del Departamento del Hemisferio Occidental Luis Cubeddu y el jefe de la misión argentina Ashvin Ahuja. También participa el representante permanente del organismo en Buenos Aires Ben Kelmanson.
Ellos estuvieron reunidos el lunes en la Rosada con Caputo y Posse.