jueves, 1 de mayo de 2025 00:45
Ayer a la mañana el sacerdote Eduardo López Márquez se presentó de manera espontánea ante la fiscal de instrucción N° 1 Jesica Miranda y denunció por extorsión a Luis Monje, el joven que lo había denunciado en el año 2021 por supuesto abuso sexual, hecho que también se investiga en dicha fiscalía. Además de dar su testimonio, el cura hizo entrega de un video que grabó en el que se escucha y se ve a la supuesta víctima en su casa pidiéndole 120 millones de pesos para “levantar la denuncia”.
A la salida de la fiscalía, Eduardo López Márquez habló con la prensa por primera vez desde que fue denunciado por abuso sexual eclesiástico y dio detalles, no solo de la denuncia en contra de Monje, sino también de la relación que tuvo tanto con él como con su primo, el joven Batallán quien también lo denunció por supuesto abuso sexual, hecho por el que en el mes de julio responderá en un juicio popular.
Sereno, sonriente y llevando consigo el clérigo, López Márquez se paró ante los micrófonos y cámaras y dio su versión.
Aclarando que era la primera vez que hablaba, el cura contó que su presentación tenía que ver con un encuentro que había mantenido recientemente con Luis Monje, en su casa, en el departamento Valle Viejo.
“Él, por Monje, se puso en contacto con mi abogado y pidió que nos reuniéramos, por eso vino a mi casa. Básicamente me pidió 120 millones de pesos para levantar la denuncia, por la que ni siquiera estoy imputado. Me extorsionó”, expresó.
Al tiempo que agregó: “Como sabía que iba a ir a mi casa, por eso fue lo que le pidió a mi abogado, lo grabé y es el video que hoy estoy presentado como prueba aquí en fiscalía. Vine solo, porque no necesito de un abogado para hacer esta presentación que espero la justicia la investigue”.
En cuanto a la motivación que pudo haber tenido Monje, el sacerdote comentó: “Siempre ha sido así. Desde que iniciaron las denuncias en mi contra hace tres años y guardé silencio, pero hoy ya no, por eso me presento ante la justicia y doy esta prueba. Él, por Monje, vivía prácticamente en mi casa porque cuida a su tío, el sacerdote Batallán porque estaba enfermo, pero cuando murió fue ahí que él y su primo Batallán hicieron las denuncias siempre buscaron dinero”.
Aclarando que Monje ni Batallán, “eran víctimas de él”, contó que en la conversación que quedó grabada al preguntarle a Luis cuanto quería este le respondió 120 millones de pesos. Imagínese esa cantidad de dinero, yo creo que ni vendiendo la mitad de la Catedral podría reunir esa plata. Ellos me arruinaron mi vida, perdí todo. Me echaron de la universidad en donde daba clases, pero pude acogerme a la jubilación por lo que percibo más de 400 mil pesos. Para sobrevivir en la actualidad hago trabajos de panadería y no se me cae nada”.
Por otra parte, consultado sobre la causa penal que investiga la fiscal Jesica Miranda y sobre la que solicitó una reconstrucción en la casa parroquial de Chumbicha, lugar en donde según el denunciante Monje al que ahora acusa de pedirle 120 millones de pesos para levantar la denuncia y no continuar con la causa, López Márquez refirió que “no estaba al tanto de esa reconstrucción. Yo no estoy ni siquiera imputado en esta causa. La justicia es lenta, pero espero que ahora con esta prueba que presento pueda tener justicia. Hace más de tres años que padezco de sus acusaciones por la que como ya dije perdí todo nunca había hablado, pero hoy decido hacerlo y estoy aquí contando lo que paso”.
En otro párrafo de la entrevista, el sacerdote se refirió a su relación con el Obispo Urbanc indicando escuetamente que era “buena”. Señalando que, para poder pagar a sus abogados, cabe señalar que sobre el cura pesa otra denuncia ya elevada a juicio popular también por supuesto abuso sexual, “estoy recibiendo ayuda de mi familia de Tucumán”.
Teniendo en cuenta que por los cargos por los que esta denunciado de ser llevado a juicio sería ante un jurado conformado por vecinos, Márquez comentó que siente el apoyo de los fieles. Que, si bien no volvió a Recreo y a Chumbicha, donde supuestamente habrían sucedido los hechos que lo acusan, los fieles de otras comunidades le demuestran su apoyo y confianza. Ahora tras la denuncia de López Márquez, deberá ser la fiscal de Instrucción N° 1 Jesica Miranda quien evalúe si el video es admisible o no como prueba y cuáles serán las medidas a tomar al respeto.