En una sorpresiva revelación, Ángel De Brito confirmó la ruptura entre el reconocido periodista deportivo Walter Queijeiro y su esposa Andrea Rivoira, después de casi dos décadas de relación. El conductor de «LAM» fue el encargado de dar a conocer la noticia, destacando que la separación fue producto de un desgaste emocional que la pareja no pudo superar.
La noticia rápidamente dio de que hablar, ya que Queijeiro y Rivoira siempre mantuvieron una imagen de pareja estable y muy feliz, aunque como en toda relación, pasaron por diversas pruebas a lo largo del tiempo. A pesar de que intentaron mantener su vida privada alejada del ojo público, ya se empezó a especular sobre las dificultades que atravesaban.
Andrea, quien ganó una alta notoriedad en 2022 por unos polémicos audios, había sido vista como una mujer decidida y directa, lo que generó una serie de enfrentamientos mediáticos con algunos compañeros de su marido. Estos episodios dieron más presión sobre la relación, que ya parecía estar en su punto más tenso.
Pepe Ochoa uno de los panelistas del programa, quien había mantenido una estrecha amistad con Queijeiro, fue quien reveló que la pareja había decidido ponerle fin a su vínculo tras varios intentos de reconciliación. Según sus palabras, el desgaste acumulado por años de convivencia llevó a Walter a tomar esta difícil decisión.
¿SE RECONCILIARÁN?
Si bien la ruptura fue una sorpresa para muchos, Ochoa dejó claro que ambos están de acuerdo en que tomarse un tiempo y reevaluar sus vidas por separado puede ser lo mejor para ellos. Sin embargo, no descartó una posible reconciliación en el futuro, lo que dejó abierta la puerta a que todo pueda cambiar con el tiempo.
Los dos están atravesando un proceso de distanciamiento, pero por el momento, no han hecho muchos comentarios públicos sobre los detalles mas minuciosos de la separación. A pesar de los rumores, el periodista sigue centrado en su carrera y los proyectos personales, mientras que Andrea se mantiene enfocada en su vida fuera de los medios.
La separación de Queijeiro y Rivoira muestra lo que muchas parejas enfrentan en el día a día: un desgaste emocional que, en ciertas ocasiones, es complicado de superar.