Se realizó ayer la segunda jornada del juicio contra el empresario gastronómico Sergio Eduardo Coria, imputado por «cinco hechos de abuso sexual simple en concurso real”, en las instalaciones del Juzgado Correccional de Tercera Nominación.
Declararon testigos presentados por la defensa a cargo de Roberto Mazzuco, y por la querella representada por el abogado Carlos Rosales Vera.
Fuentes judiciales informaron que ante el tribunal presidido por el juez Correccional Javier Herrera y el fiscal Víctor Figueroa, brindaron su testimonio varios testigos y dos peritos de oficio que participaron en las diligencias preliminares para determinar el perfil de Coria.
Por otra parte, se visualizaron las imágenes registradas por una cámara de seguridad del local comercial donde ocurrió uno de los cinco hechos denunciados.
Desde la querella explicaron que esta segunda audiencia fue positiva -como la del miércoles-, porque “hubo testigos que ratificaron los excesos que habría cometido el señor Coria en el marco de la denuncia, no solo con mi asistida, sino en dos casos más”.
En diálogo con El Ancasti, Rosales Vera indicó que el miércoles una testigo mencionó que sufrió actos de abuso y que ayer, otra testigo habló de dos casos más, el de la denunciante y otro, totalizando tres casos.
Además, declararon dos peritos, una psiquiatra y una perito de la oficina forense, «que dieron cuenta del perfil particular de este señor”, agregó.
Se supo que también declaró una perito de parte que analizó el perfil de la víctima, «que llegó a la conclusión concreta de que la chica sufrió una presión enorme y que no estaba fabulando, que no mentía, no exageró y que pasó un trauma complejo en el marco del trabajo que realizaba” en el bar donde era empleada.
La presentación de testigos continuará hoy y podrían ser trasladados a la Sala de Audiencias por la fuerza pública, esta semana o la semana que viene.
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«Se cumplió hoy (por ayer) con una prueba que para nosotros es determinante, donde se ve una inconducta de este señor», remarcó Rosales Vera.
«Hemos podido observar todos frente al juez en la sala de audiencia, visualizado por una de las cámaras de seguridad de la empresa, uno de los hechos de abuso denunciados. La denuncia es por cinco hechos y los demás se produjeron en la intimidad. Esto demuestra que los dichos de mi asistida son verdaderos porque está comprobado fehacientemente», recalcó el querellante.
«Lo real es que estos delitos se cometen por lo general en la intimidad y no es tan factible que se conozcan abiertamente. Pero tampoco es necesario que se repitan. Con un solo caso es suficiente, y acá existen dos casos más que si bien no fueron denunciados, fueron ventilados en la audiencia», apuntó.
Los hechos por los cuales el empresario es juzgado fueron denunciados hace cuatro años, cuando la víctima tenía 20 años.
En un primer momento la investigación estuvo a cargo de la fiscal Myriam López y luego quedó en manos del fiscal Sebastián Pelisari.
Los hechos que se le endilgan al reconocido empresario que está en libertad, son de abuso sexual simple, en concurso real.