miércoles, 24 de septiembre de 2025 09:05
La central nuclear de Zaporiyia, ubicada en Ucrania, se quedó sin suministro eléctrico externo el pasado martes, un incidente que, según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), subraya los riesgos persistentes para la seguridad nuclear. Este es el décimo corte de energía que sufre la planta durante el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, lo que demuestra la vulnerabilidad de sus operaciones.
Generadores de emergencia en funcionamiento
Tras el incidente, el director general del OIEA, Rafael Grossi, informó a través de la plataforma social X que los generadores diésel de emergencia de la central se habían activado para garantizar la continuidad del suministro de energía. El organismo, que mantiene un equipo de expertos en el lugar, ha iniciado una investigación para determinar la causa del corte.
A pesar de que los seis reactores de Zaporiyia se encuentran en un estado de parada en frío desde el año 2024, aún requieren electricidad para mantener operativos sus sistemas de refrigeración, vitales para las piscinas de combustible gastado y los núcleos de los reactores.
Riesgos persistentes y contexto histórico
El OIEA ha destacado en varias ocasiones la fragilidad del suministro de energía de la planta, un factor crítico para su seguridad. Antes del inicio del conflicto, la central de Zaporiyia contaba con 10 líneas eléctricas externas, lo que le proporcionaba una robusta redundancia. La serie de cortes sufridos desde entonces evidencia las graves consecuencias del conflicto en la infraestructura civil y la necesidad de proteger estas instalaciones estratégicas para evitar un desastre nuclear.