sábado, 20 de septiembre de 2025 09:44
Con la llegada de los primeros días cálidos de la primavera, crece la preocupación por el dengue, una enfermedad viral transmitida por mosquitos que se expande cada vez más como consecuencia del cambio climático.
Lejos de limitarse a zonas tropicales, el virus hoy constituye un problema de salud pública en todo el continente, incluyendo regiones que antes no presentaban riesgo. El mosquito Aedes aegypti logró adaptarse a nuevos ambientes y extendió su período de actividad: ya no es una amenaza exclusiva del verano, sino una presencia constante en gran parte del país.
Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en 2024 se registraron más de 12,6 millones de casos en América Latina, casi el triple que en 2023. Del total, más de 21.000 fueron casos graves y 7.700 personas murieron. Brasil, Argentina, Colombia y México concentran la mayoría de los contagios, con Brasil a la cabeza.
“El Aedes aegypti necesita muy poco para reproducirse: apenas unas gotas de agua estancada y algo de calor. El cambio climático le da cada vez más margen para proliferar y mantenerse activo durante todo el año. Por eso, no podemos bajar la guardia”, alertó el infectólogo Rodolfo Luján.
El dengue puede afectar varias veces a la misma persona, ya que existen cuatro serotipos distintos del virus. Su transmisión ocurre únicamente a través de la picadura del mosquito infectado, que se cría en recipientes con agua estancada —tanques, macetas, bebederos de mascotas o canaletas tapadas— y prolifera en climas cálidos y húmedos.
El aumento de las temperaturas, las lluvias intensas y los períodos prolongados de calor conforman un escenario ideal para la propagación del mosquito durante todo el año, lo que transforma al dengue en un desafío sanitario permanente.
La prevención es fundamental: vigilar el entorno, eliminar criaderos, usar repelente y ropa adecuada son medidas simples pero claves. “No se trata solo de una cuestión individual. Cada criadero que se elimina es una barrera más contra el dengue en la comunidad. Por eso, la prevención debe ser una responsabilidad compartida entre ciudadanos, autoridades sanitarias e instituciones. Solo así podremos hacer frente a una enfermedad que, en un contexto de crisis climática, llegó para quedarse”, concluyó Luján.
Fuente: Noticias Argentinas