sábado, 6 de septiembre de 2025 14:10
Un confuso y dramático episodio sacudió a la comunidad educativa de Tupungato, Mendoza. Una vicedirectora fue detenida bajo la grave acusación de distribuir material de abuso sexual infantil, luego de que una ONG de Estados Unidos alertara a las autoridades locales por un video sospechoso subido a YouTube desde su domicilio.
El operativo se realizó el 7 de agosto, cuando el Ministerio Público Fiscal allanó tres viviendas, la de la docente y la de sus hijos. En la casa de la mujer secuestraron un celular desde el cual se había grabado y publicado el contenido. La educadora fue esposada en su lugar de trabajo y pasó siete horas detenida, sin comprender lo que ocurría.
Con el avance de la causa, la situación dio un giro inesperad, ya que el video había sido filmado por su nieta de 11 años, quien utilizó un celular viejo guardado en un cajón de la abuela. En Cámara Gesell, la niña reconoció que imitaba a compañeras mayores de la escuela que grababan contenidos similares.
La docente quedó en libertad, pero sufrió graves consecuencias, fue apartada de su cargo directivo, degradada a tareas administrativas y finalmente suspendida sin goce de sueldo, justo cuando se preparaba para concursar como directora titular.
El fiscal Pablo Fossarolli ya solicitó el sobreseimiento, confirmando que en los dispositivos secuestrados no había material de distribución ni de producción de abuso infantil.
Más allá del alivio judicial, el daño personal y social es profundo. Tupungato es un pueblo chico, todos saben lo que pasó. A ella le arruinaron la vida y a la nena también, que tuvo que afrontar pericias, una Cámara Gesell y el bullying escolar. Están pensando en irse del pueblo, explicó Juan Franco Ferraris, abogado de la docente.