En diálogo con Canal E, Miguel Ponce, analista internacional, especialista en comercio exterior y actual director del Centro de Estudios para el Comercio Exterior Siglo XXI, advirtió desde Madrid sobre “un acuerdo indigno” que, según él, redefine la relación de Europa con Estados Unidos.
Una rendición energética y comercial
“Claramente la sensación de humillación que vive Europa es muy grande”, sostuvo Ponce al describir el sorpresivo acuerdo firmado entre la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y Donald Trump en Escocia. Según el experto, el pacto implica que Estados Unidos impone un 15% de arancel a las exportaciones europeas, mientras que Europa acepta abrir su comercio con aranceles del 0%, en una concesión que calificó de histórica.
“Esto marca un antes y un después en la historia europea”, subrayó el analista, al remarcar que la decisión se tomó sin el consenso pleno de los países miembros y que ha generado fuertes críticas internas. El eje central del acuerdo no es sólo comercial: Europa se compromete a comprar energía estadounidense por 750 mil millones de dólares, lo que, en palabras de Ponce, “significa triplicar lo que actualmente le está comprando”.
Esto genera, según explicó, una dependencia sin precedentes: “Nunca Europa había sido tan dependiente energéticamente de ningún país, ni siquiera de Rusia”, aseguró. Ponce también señaló que este tipo de decisiones suelen tener consecuencias geopolíticas profundas: “Este es un giro estratégico que reconfigura todo el tablero internacional”.
La sombra de Trump y el rol de Argentina
Desde Madrid, donde se encuentra de viaje, Ponce explicó que en Europa se comenta el acuerdo como si fuera “del día de la liberación al día de la capitulación”, aludiendo a la guerra arancelaria iniciada durante el mandato anterior de Trump. Para él, la influencia del expresidente norteamericano sigue condicionando las decisiones globales, a pesar de no ocupar actualmente la Casa Blanca.
Consultado sobre el impacto para Argentina, Ponce remarcó que el acuerdo podría abrir una ventana de oportunidad. “La quita de aranceles para productos que se importen desde Argentina pondría al país en mejor situación que Brasil en algunos sectores”, explicó. Sin embargo, fue cauteloso: “Esto cambia en horas, y el protagonismo de Estados Unidos hace que muchas regiones miren esto con recelo”.
También advirtió que el nuevo escenario mundial exige una diplomacia más activa por parte de países como Argentina, que deben saber aprovechar estos momentos de reconfiguración global: “Estamos en un tiempo donde el que no se posiciona con claridad, queda afuera”, concluyó.