lunes, 21 de julio de 2025 15:00
Marixa Balli volvió a conmover con sus declaraciones, esta vez en el programa A la Barbarossa de Telefe. La empresaria y panelista abrió su corazón para hablar de su presente y del calvario que atraviesa a más de cuatro años del asesinato de su hermano, una situación que, según sus propias palabras, la hace pensar en irse a vivir al exterior.
Durante la emotiva charla, la figura mediática recordó la trágica muerte de su familiar, víctima de un brutal accidente vial, y no ocultó su indignación por la decisión de la justicia. La víctima, un peatón, cruzaba por la senda correspondiente cuando «este tipo venía descontrolado en su moto, cruzó en rojo y lo chocó».
El impacto de la injusticia la marcó profundamente. «El asesino de mi hermano quedó libre. Le iniciamos un nuevo juicio civil», reveló, visiblemente afectada. Sus palabras fueron un grito de dolor y frustración ante el sistema judicial: «La justicia es un desastre. Matar es gratis porque no vas en cana”.
Este sentimiento de impunidad es lo que alimenta su deseo de dejar el país. «A veces cuando transito por lugares de esta capital digo ‘qué ganas de irme’», confesó con sinceridad. La exvedette proyecta un futuro lejos de su tierra natal cuando las circunstancias se lo permitan.
«Creo que cuando ya nada me detenga sería bueno vender todo lo que tengo e irme», reveló. Sin embargo, existe una poderosa razón que la mantiene anclada por ahora: «La única razón por la que sigo acá es por mi madre”.
A pesar de su enojo con el sistema judicial y la situación social, la mediática dejó en claro su amor por su nación. «Amo este país, pero me da mucho enojo que todo el mundo la pase tan mal, que matar sea tan fácil», explicó, añadiendo que posee nacionalidad italiana y desea «terminar mi vida tranquila”.
Además, en el mismo programa, la artista protagonizó un tenso ida y vuelta con el conductor de LAM, Ángel de Brito, a raíz de un comentario sobre su puntualidad. «Vos dijiste algo que me dolió: ‘Marixa llegó 8 menos 5’. Y no, llegué 6:45”, se defendió. «Me sentí ofendida. Vengo temprano, me quedo acá al lado”, afirmó con firmeza, fiel a su estilo frontal.
Sus declaraciones generaron una fuerte repercusión en redes sociales, donde numerosos usuarios empatizaron con su dolor. La historia personal de la panelista, atravesada por la tragedia y la lucha, sigue generando identificación en muchos argentinos.