sábado, 19 de julio de 2025 01:42
Tal como informó este diario en su edición de ayer, el hombre de apellido Zárate, de 53 años, cuyo cuerpo fue encontrado el jueves pasado al mediodía por los vecinos en el comedor de la casa en la que vivía solo, falleció a consecuencia de la inhalación de monóxido de carbono. Así lo confirmó la operación de autopsia que se realizó ayer en la morgue del Cementerio Municipal de esta Capital. Finalizada la medida judicial dispuesta por el fiscal de la Segunda Circunscripción Judicial, con asiento en Andalgalá, se ordenó la entrega del cuerpo a los familiares.
Fuentes policiales y judiciales consultadas por El Esquiú.com informaron que la operación de autopsia se realizó durante la mañana en la morgue del cementerio, estableciendo los médicos del Cuerpo Interdisciplinario Forense que participaron de esta, que Zárate, el vecino oriundo de Mutquín cuyo cuerpo sin vida fue hallado por los vecinos tendido en el suelo del comedor, murió a raíz de la inhalación de monóxido de carbono.
Tal como lo público en exclusiva este diario en su edición de ayer, aparentemente el hombre, que vivía solo y tendría problema con el consumo de bebida, habría iniciado de forma accidental el incendio en su habitación, del que intentó aparentemente escapar, pero no pudo y cayó desvanecido en el comedor. El monóxido, que se extendió rápidamente por los ambientes de la vivienda, le ocasionó la muerte.
Los vecinos de Zárate, extrañaron no verlo durante la mañana del jueves, lo que era poco usual, por lo que uno de ellos fue a buscarlo en su casa. Luego de reiterados llamados a la puerta y no recibir respuesta por parte de Zárate, esta persona se dirigió hasta la ventana de la vivienda y observó a través de ella el interior. Ahí divisó tendido inmóvil sobre el suelo del comedor a su vecino y de inmediato llamó a la policía.
Como la puerta estaba cerrada, el personal debió romperla para acceder y así poder asistir a Zárate, quien lamentablemente ya estaba sin signos vitales.
Al dirigirse al dormitorio, los investigadores advirtieron que parte del colchón de la cama y otros muebles que había en la habitación estaban quemándose, por lo que sofocaron las llamas.
Lamentablemente, con la muerte de Zárate por inhalación de monóxido de carbono producido por el incendio de la vivienda, ya son cuatro los catamarqueños que perecieron en estas circunstancias, entre el viernes 4 de julio y el 17 de julio, ocurriendo los tres primeros en nuestra ciudad capital, tratándose de dos niñas de 2 y 7 años y de Micaela Ibarra, cuyo incendio habría sido originado de forma intencional.