En diálogo con Canal E, el politólogo y economista Pablo Tigani analizó el escenario electoral de la tercera sección bonaerense y cuestionó con dureza el rumbo económico del Gobierno nacional.
El peso de Cristina Kirchner en la tercera sección
«Cristina tiene muy buena acogida en la tercera sección electoral«, aseguró el analista al referirse a distritos clave como Avellaneda, La Matanza, Lomas de Zamora y Almirante Brown. Según él, una candidatura encabezada por la exmandataria «seguramente tendría una buena performance«, lo que fortalecería las chances del oficialismo en octubre.
El politólogo también cuestionó la estrategia opositora. «A Jorge Macri le fue muy mal con el desdoblamiento«, recordó, aludiendo a intentos fallidos de diferenciarse. Para Tigani, «apuntalar a Cristina en la boleta puede llevar a un resultado electoral mejor«.
Libertarios sin sustento real
Consultado sobre las chances de los libertarios en esa zona, Tigani fue tajante: «No lo creo, menos el personaje que lo dijo, que no parece un político, es un youtuber«. Señaló que «La Libertad Avanza es 75, 80% relato y 20% acciones performativas» y describió el fenómeno como «una marginalidad que ayudó mucho a que Milei sea presidente«, pero sin base territorial sólida.
Además, advirtió que «la sociedad empieza a darse cuenta que esta situación no es lo que se había expresado» y que el ajuste económico impacta directamente en sectores vulnerables: «Todo ese dinero que se le paga a los bancos sale de las jubilaciones, pensiones, de las escuelas y universidades más pobres«.
FMI y maquillaje fiscal
En referencia al vínculo con el Fondo Monetario Internacional, Tigani criticó el enfoque oficial. «No es un guiño, es un tirón de orejas«, dijo sobre la actitud del FMI, y advirtió que «el superávit fiscal que muestra el Gobierno es en realidad un déficit nueve veces mayor«.
El analista también hizo una advertencia sobre el contexto: «Los mercados huelen sangre«, aseguró. Según él, cuando se percibe inestabilidad social, «empiezan a asociarlo con episodios como 2001 o 2018«, y eso puede precipitar una nueva crisis financiera.
El fantasma del 2001
Tigani trazó un paralelismo entre la situación actual y la crisis de 2001. «En octubre se perdió, en noviembre corralito y en diciembre helicóptero«, recordó. Si bien hoy los movimientos sociales están menos activos, destacó que «no hay una red de contención como la que existía entonces«. Y remató: «Esto se asocia con 2001. La gente lo recuerda«.
Frágil escenario económico
Respecto al futuro inmediato, Tigani expresó pesimismo: «Faltan tres meses para las elecciones provinciales y cuatro para las de medio término, y eso en Argentina es un siglo«. En su análisis, el Gobierno depende excesivamente del financiamiento externo y de medidas que no llegan a revertir la recesión.
La situación del sistema financiero también preocupa. «El sector privado está dando muestras de agotamiento«, indicó. Y alertó: «Si los bancos prestan a empresas que no pueden devolver, colapsa el sistema financiero«.
Para Tigani, el modelo actual es inviable a largo plazo. «Este no es el país de las maravillas«, sentenció, y consideró que sin un cambio de rumbo, «el riesgo del colapso social puede terminar generando una crisis financiera y cambiaria de magnitud«.