Una tremenda tragedia ocurrió en las últimas horas en una vivienda de la Capital.
Según la investigación, un pequeñito de sólo 60 días de vida que era amamantado por su madre, una joven de 23 años de edad, murió cuando ésta se durmió y lo apretó con su cuerpo.
Al despertar la progenitora notó a su hijo sin signos vitales por lo que salió a pedir ayuda siendo auxiliada por un vecino que la trasladó a ambos al Hospital de Niños Eva Perón.
Lamentablemente, los médicos constataron que el bebé había arribado sin vida. De inmediato se dio intervención a la justicia que ordenó la realización de la autopsia que arrojó como resultado que el fallecimiento del infante fue por asfixia por sofocación