sábado, 11 de enero de 2025 01:02
La Fiscalía de la Tercera Circunscripción Judicial con asiento en la ciudad de Belén, departamento homónimo, imputó e indagó en los últimos días a una pareja que se había denunciado mutuamente. El jueves a la noche la Fiscalía resolvió la libertad del acusado, de apellido Isasmendi, quien se comprometió a marcharse de la ciudad de Belén y no regresar para evitar tener contacto con su expareja y madre de su hija. A la vez, la Justicia valoró también que el acusado trabaja en las minas y necesita hacerlo para poder contar con dinero y mantener a la niña.
Tras la liberación del imputado, hubo malestar por parte del abogado de la mujer, doctor Nieva, quien cargó contra la resolución judicial.
Si bien es cierto que su asistida sufrió una herida punzocortante a la altura de la cintura, la Fiscalía imputó e indagó a la mujer por los delitos de violación de domicilio y desobediencia judicial.
El pasado 26 de diciembre se presentó en la casa de Isasmendi, que estaba al cuidado de la hija de ambos, en aparente estado de ebriedad. Allí intentó llevarse a la niña y, en el forcejeo, él hirió a la mujer, quien fue llevada al hospital para su desintoxicación y curación.
En tanto, el sindicado fue detenido, imputado e indagado por el delito de lesiones leves, calificadas por mediar relación de pareja. El pasado 4 de enero, la fiscal Florencia Reartes Sesto sometió a Isasmendi a una pericia psiquiátrica, mientras que, por su parte, la mujer se negó a realizarla. Esta había sido ordenada a los fines de una evaluación para la colocación de un dispositivo electrónico a ambos, en razón de que la relación es “tóxica”, sin respetarse uno al otro, ni cumplir con las disposiciones de la Justicia.
Si bien la pericia de Isasmendi arrojo como resultado que es una persona que puede tener reacciones violentas, es apto para cuidar a su hija de dos meses de vida.
Como el día jueves se vencían los plazos para solicitar la prisión preventiva para él -quien llevaba más de diez días detenido-, y ante el avance de la investigación, la fiscal resolvió otorgarle la libertad e imponerle reglas de conductas como el no acercamiento a su expareja y a su hija.
Además de resolver la situación procesal del imputado, la jueza dispuso mediante la asesora de menores que la pequeña quedara a la guarda de su abuela materna y que el móvil policial realizara rondas de prevención dos veces al día en la casa de la mujer.