El policía Jonathan Matías Ortega, investigado por los disparos que sufrió Kevin Brandán, fue liberado a las pocas horas de transcurrido el hecho. Así lo decidió el fiscal de Instrucción N° 5, Hugo Costilla, quien está a cargo de la pesquisa. Desde el Ministerio Público Fiscal (MPF), dieron a conocer que Costilla ordenó el cese de arresto y le impuso restricciones a Ortega.
Según detallaron, la medida fue dispuesta al haberse cumplido las diligencias procesales correspondientes en un plazo menor a 24 horas. Desde el MPF explicaron que, como no existe riesgo procesal, se ordenó el cese del arresto y el policía será citado para prestar declaración indagatoria en las próximas horas. En ese contexto, en base a las pruebas reunidas en la causa, así como el último parte médico de Brandán, determinarán la imputación que se le asignará al oficial.
En paralelo, y en base a la investigación sobre el hecho que protagonizó Brandán, en el intento de robo del reflector del comercio ubicado a la par de la casa del policía, una vez que éste se recupere será indagado por “robo en grado de tentativa”.
La cámara de seguridad de ese local, ubicada en el interior del mismo, es la que tomó el hecho. Tanto la del intento del robo del reflector como la acción del policía Ortega.
De acuerdo con la información a la que accedió El Ancasti, hasta ayer, Brandán permanecía internado con pronóstico reservado. Por otra parte, se supo que el policía Ortega podría ser acusado por los delitos de “lesiones graves” y “abuso de autoridad”. El arma reglamentaria de Ortega, con la que se efectuaron los disparos en contra de Brandán, está secuestrada.
Hecho
El suceso de sangre ocurrió en la madrugada del último sábado, en el norte de la ciudad. El hecho dejó como saldo a Brandán herido por arma de fuego. Por tratarse de un caso que involucra a un miembro de la fuerza policial, el fiscal trabaja en la investigación con personal de Gendarmería Nacional Argentina (GNA).
El episodio se produjo alrededor de las 2.30 de la mañana en las inmediaciones de las avenidas México y Legisladores. La Policía fue alertada por llamados de vecinos que informaron haber escuchado detonaciones. Al llegar al lugar, los uniformados visualizaron a dos personas en la vía pública: una tendida en el suelo y otra con el torso desnudo, quien se identificó como policía y manifestó haber reducido al individuo herido, a quien sindicó de haber ingresado a robar en su vivienda.
De acuerdo con el protocolo, los policías convocaron al SAME para asistir al herido y notificaron al fiscal Costilla. Asimismo, siguiendo el procedimiento, los efectivos resguardaron el arma de fuego hasta la llegada de los peritos.
Las primeras actuaciones se basaron en la declaración del policía, identificado de apellido Ortega, quien afirmó haber actuado en defensa propia al reducir al individuo que habría ingresado a su vivienda y lo habría atacado con un arma blanca. Esta versión fue respaldada por su pareja, quien también radicó una denuncia detallando lo mismo. En el lugar se secuestró un arma blanca.
Con el avance de la investigación, las pruebas reunidas por los peritos y el análisis de una cámara de seguridad de un comercio revelaron que los hechos no ocurrieron como Ortega y su pareja lo habían indicado.