Una resolución de la ex AFIP es cuestionada por las empresas porque implica un mayor costo para la importación de bienes. La había implementado el exministro de Economía cuando era candidato en 2023-
En el Boletín Oficial del 30 de diciembre se publicó la Resolución General N° 5624 de la ARCA (ex AFIP) que dispuso prorrogar hasta el 30 de junio de 2025 la suspensión de la aplicación de las ventajas impositivas en IVA y Ganancias para la importación de numerosos bienes. Uno de los sectores afectados es el automotor, aunque impacta en varios rubros.
Se trata de un anticipo de IVA adicional que deben pagar las empresas cuando nacionalizan un bien. Además del IVA del 21%, hay un alícuota de 20% que se debe anticipar a modo de recargo.
Durante la gestión de Sergio Massa como ministro de Economía tuvo una modificación. Hasta ese momento, las empresas que tenían crédito fiscal estaban exentas de pagarlo. El exfuncionario dispuso que debían pagar el anticipo igual y luego se recuperaría en el momento de la venta del producto importado.
Fue una forma que buscó el entonces candidato presidencial para aumentar la recaudación y tener más fondos para destinarlos a medidas de subsidio al consumo. Lo que se conoció como «plan platita».
En el inicio de la gestión de Javier Milei se decidió renovar la suspensión de esa eximición de pago. El plazo vencía a fin de año y, con la resolución de la ARCA, se volvió a confirmar la medida kirchnerista.
En el sector automotor hay una mezcla de sorpresa y malestar ya que esperaban que se diera de baja el mecanismo que dispuso Sergio Massa y que va en contra del discurso oficialista.
En la primera parte del año se entendió su continuidad como la necesidad urgente de mantener los ingresos en un momento de debilidad fiscal y con el objetivo de reducir el déficit. Esta renovación ya es cuestionada.
El sector tiene una alta presión tributaria y se viene reclamando que se avance en la baja de impuestos. La carga fiscal es la principal explicación que se da sobre el alto valor de los autos en la Argentina.
MDZ conversó con un importador de autos que explicó cómo funciona el polémico mecanismo y el impacto que tiene para el negocio y en los costos de los 0km.
Sus definiciones
«Afecta básicamente a las empresas que tienen cierto nivel de facturación o de cantidad de empleados. A empresas más grandes. No a las mipymes. También a las que, por ejemplo, tienen un socio extranjeros. Si tenías saldo de IVA o de Ganancias a favor, podías pedir la exención a la AFIP. Al tener crédito fiscal no te hacían pagar ese doble IVA cuando nacionalizabas. Cada tanto tiempo la pedías y te la daban. Juntabas otra vez crédito fiscal y la volvías a pedir y te la volvían a dar. Massa lo suspendió por seis meses. Después Milei lo volvió a suspender por seis meses y, ahora, vuelven a suspender ese beneficio. Entonces, así, te cobran el doble IVA en la Aduana y la única manera de bajarlo es facturando, pero se recupera tiempo después. El Gobierno, de esa forma, trabaja con tu plata. Te cobran anticipos que se recupera mucho después. El de Ganancias recién en mayo».
«Pensábamos que con Milei estas cosas iban a terminar. Son ideas de Massa y Milei las continúa».
«Esa plata inmovilizada tiene un costo financiero y ese costo va a los precios de los productos. Los productos podrían ser más baratos, pero uno lo tiene que contemplar cuando fija el precio porque si no no es rentable. Alguien puede decir que si no lo pagáramos lo pasaríamos a rentabilidad, pero con un mercado tan competitivo como el actual, lo tenés que trasladar a una mejora del precios. Puede no ser mucho, pero todo suma y siempre para el mismo lado. El IVA siempre se paga cuando facturás, pero que retengan en la Aduana un IVA adicional es ilógico».
«Para un importador mediano, puede representar un dinero inmovilizado de unos $1.000 millones. Es plata que tiene el Gobierno y que no le pertenece. Así es como financió Massa parte del “plan platita”. Y tanto Milei como (Luis) Caputo no la ven, como dicen ellos».
«Esto lo pagan todas las automotrices. Obviamente, en un contexto inflacionario es diez veces peor, pero es un costo importante aún con baja inflación. Con un costo del dinero de 5% por mes, esos $1.000 millones son $50 millones que se pierde la empresa y se la queda el Estado. Imaginate empresas con números más grandes. El Estado no te paga intereses por lo que te retiene. Te saca la plata y uno tiene que recuperarla, pero el tiempo que no tuviste la plata es pérdida».
«Lo normal es que uno pague el 21% sobre el valor CIF, pero no ese 20% adicional. Eso hace que tengas que desembolsar un montón de plata para nacionalizar los autos que se recupera cuando se vende y se factura. Ese proceso puede llevar 30 días o más. Estamos financiando al Estado a tasa 0% con nuestro dinero».