domingo, 5 de enero de 2025 14:00
Cuando pensaban que el verano argentino sería tranquilo, golpeó al mundo del espectáculo el culebrón turco que tiene como protagonistas a Wanda Nara, Mauro Icardi y Eugenia la China Suárez, el triángulo amoroso que data desde el 2021 cuando comenzó el WandaGate.
Cuatro años más tarde, y después de los idas y vueltas hasta la separación de la ex conductora de Bake Off Famosos y el delantero del Galatasaray, continúan los vestigios del pasado que entrelaza la historia de la familia Icardi con la conocida actriz protagonista de “Argentina, tierra de amor y venganza”.
Si bien la hermana de Zaira Nara se supone que pasó página, ya que comenzó hace un mes (o continúo) la relación con Elián Valenzuela, más conocido como L-Gante, aún no suelta su vínculo con Mauro y así lo demostró el viernes en el programa de Ángel De Brito.
Es que la cantante de Bad Bitch se despachó en el programa de América TV, LAM, y sacó todos los trapitos al sol sobre las falencias del padre de sus hijas en todas las áreas. Debido a este descargo Ángel comunicó a través de sus redes sociales que la China tuvo una fuerte discusión con el rosarino.
Es que la ex Casi Ángeles no tenía conocimiento que la mansión que compartía con Icardi era la casa de los sueños de la dueña de Wanda Cosmetic. Eugenia cansada de todos los chats que se están filtrando en donde el deportista, según Nara, la trata de “fácil y sucia” decidió ponerle punto final al vínculo.
De Brito además de seguir compartiendo todos los chats de la conductora con su ex marido comunicó la mudanza de la actriz. “La dama japonesa levantó campamento. Llenó dos camionetas y se fue. La falsa niñera se calentó porque se dio cuenta que la casa es de la otra. Su obsesión”, escribió Ángel.
El comunicador también, sobre la novela turca sin fin, para finalizar agregó: “Cuando era amiga de la modelo, él mandaba fotos todo el tiempo de ella (emoji de hamburguesa para referirse a Wanda), sus hijas, su cartera, su vestidor, etcétera”.