miércoles, 18 de diciembre de 2024 01:59
El senador radical Flavio Fama abrió la puerta para negociar una alianza con los libertarios, con vistas a competir en las próximas elecciones y sentar las bases para buscar en 2027 destronar al peronismo del poder en Catamarca, justo en la elección en que el actual oficialismo podría asegurarse 20 años de hegemonía para empardar el dominio radical registrado entre 1991 y 2011. La idea del exrector de la Universidad Nacional de Catamarca, que además de los libertarios quiere sumar a otros sectores, no es novedosa. Los radicales, que lideraron aquella alianza que condujo la provincia desde la intervención del ‘91, mantienen desde que perdieron el poder el sueño de reeditar una coalición que les permita hacer frente a un PJ cada vez más consolidado. Como aspiración es legítima y quizás el camino más racional, ya que el centenario partido boinablanca está debilitado como nunca, y tiene plena conciencia de que solo no tiene ninguna posibilidad de alcanzar un triunfo. La UCR, incluso con varios socios de Juntos por el Cambio como refuerzo, completó un papelón el año pasado y terminó en cuarto lugar en las urnas, detrás de Unión por la Patria, La Libertad Avanza y los votos en blanco. Un rechazo contundente que dejó secuelas, y se expresa en la ausencia de liderazgos y fricciones internas como las que emergieron en la última Convención partidaria. Buscar la compañía libertaria no asoma así como una estrategia, sino como una vía de supervivencia.
Sin proyecto
El problema de avanzar hacia una alianza es que marcharía en contra de todo lo que han pregonado los radicales después de cada derrota: recuperar la identidad, elaborar un proyecto propio, proponer un cambio a la sociedad. No han logrado darle forma a ninguna propuesta sólida, y por ello les queda como opaca opción salir a buscar votos de cualquier parte, a como de lugar, para poder conservar algún espacio. Es un objetivo muy flaco, y que por otra parte no dio ningún resultado hasta aquí. No se advierten diferencias entre un posible abrazo a los libertarios con la anterior aventura de sumarse al macrismo, que la UCR vislumbraba como la oportunidad de recuperar cartel para luego encabezar el proyecto, y al cabo terminó pagando el fracaso de la gestión del empresario PRO. Si los radicales se asocian con un endeudador compulsivo primero y luego inician un romance con quien propone destruir el Estado desde adentro, no harán más que evidenciar que no tienen otra ideología o propósito que acceder al poder por cualquier vía. La postura es muy notoria, y quizás a ello obedezca el sistemático fracaso boinablanca de los últimos tres lustros.
Salariazo
Victoria Villarruel expuso a los senadores nacionales sobre los incrementos que comenzarán a tener en sus dietas a partir del 1ro. de enero, cuando se acabe la suspensión de aumentos que el cuerpo mismo votó en agosto pasado. “Solicité que se tratara el congelamiento de las dietas de los senadores, porque a partir del 1ro. de enero se comienzan a actualizar automáticamente, cuestión que espero que los senadores traten. Yo no soy senadora, sólo facilito las condiciones para el tratamiento y la discusión de este tema, pero no soy las que toma las decisiones”, dijo lavándose las manos en declaraciones a la prensa y consideró que “entendiendo el esfuerzo inmenso desde lo económico que está haciendo la población, creo que debemos estar a la altura”. Tras varios meses y con los cambios que se sucedieron en ese lapso, las palabras de la vicepresidenta fueron todo un giro respecto de lo que opinaba en marzo pasado, cuando los senadores todavía no habían resuelto aumentarse las dietas y cobraban abajo de los 2 millones de pesos. En ese momento, Villarruel se resistía a cumplir con el pedido de Javier Milei para que se diera marcha atrás con una suba del 30% -finalmente firmó la resolución junto a Martín Menem- y expresó en una entrevista que los legisladores “no ganan bien”. A diferencia de cómo se manejó el aumento de dietas en la Cámara de Diputados, los senadores fueron al recinto el 18 de abril y resolvieron la cuestión por su propia cuenta: en una votación a mano alzada y sin debate se aumentaron las dietas más del doble y dispusieron atarlas a las subas que acordarían en adelante los gremios legislativos. Así, en abril, las dietas de los senadores que estaban por debajo de los 2 millones de pesos pasaron a más de 4 millones de pesos netos. Sumado a algunos diferenciales, el bruto ascendía a más de 6 millones de pesos. A mitad de año, cuando los gremios acordaron nuevos aumentos para julio y agosto, se conoció que esto impactaría de lleno en las dietas de los senadores, llevándolas a 8 millones de pesos en neto. Ahora, a días que culmine el año, las dietas de los senadores volverán a estar “enganchadas” a las paritarias de los empleados del Congreso en 2025. Según confirmaron fuentes del Senado, efectivamente las dietas subirían a 10 millones de pesos. Nada mal, como para llegar a fin de mes sin sobresaltos.
Recuerdos
Hace dos años, Argentina vencía a Francia en una dramática definición por penales, y se coronaba campeona mundial de fútbol por tercera vez en su historia, poniendo fin a una dolorosa serie de 36 años de frustraciones en la máxima competencia futbolística. La victoria representó la consagración eterna de Lionel Messi y quizás la última gran alegría para el pueblo argentino, que saldría a las calles para protagonizar un festejo sin precedentes. El equipo conducido por Lionel Scaloni, que no tenia experiencia en la dirección técnica, llegó a la cita ecuménica con un invicto de más de 30 partidos, pero debutó con una sorpresiva derrota ante la débil Arabia Saudita. Se recuperó luego venciendo a México y Polonia para ganar su grupo, y ya en la fase de eliminación directa despachó sucesivamente a Australia, Holanda y Croacia, para definir el título con Francia, campeón vigente. El último partido fue una catarata de emociones. Argentina lució su mejor versión y tomó ventaja con un cómodo 2-0, pero cerca del final, en una ráfaga de menos de dos minutos, Francia logró igualar. Debió jugarse media hora más, en la que Argentina otra vez pasó al frente, pero Francia empató nuevamente para sellar el 3-3, con tres tantos del temible Mbappe. A segundos del final, Francia tuvo el triunfo servido pero una asombrosa reacción del arquero Dibu Martínez lo impidió. Llegaron así a los remates desde los 12 pasos, donde Argentina no falló y recuperó su reinado en el fútbol mundial desde los lejanos desiertos de Qatar.
El Esquiú.com