El Gobierno extendió por dos semanas el plazo de la licitación para el manejo de la Vía Navegable Troncal de los ríos Paraná y Paraguay (la «Hidrovía«) hasta el 12 de febrero de 2025, a pedido de las cuatro empresas de dragado y balizamiento que están interesadas en quedarse con la concesión privada durante 30 años.
Además, Javier Milei le concedió un pedido al gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, para que los pliegos contengan la obligación de hacer estudios de impacto ambiental para que el dragado de los canales Paraná Guazú y el Pasaje Talavera sea a una profundidad de 36 pies, en vez de 28 pies, lo que fomentará el desarrollo en los puertos del sur de la provincia.
Asimismo, las modificaciones a los pliegos -plasmadas con la disposición 36/2024 de la Subsecretaría de Puertos y Vías Navegables, publicada este miércoles en el Boletín Oficial- establecen que los estudios de impacto ambiental que hará el nuevo concesionario serán para que la profundidad del calado sea a 44 pies, en lugar de los 42 originales.
Las cerealeras, principales clientes de la Hidrovía, pidieron una mejor calidad de estudios de tráfico para conocer de cerca el negocio y pelear mejor las tarifas.
Las empresas que compiten por la privatización de la Hidrovía, que genera una facturación estimada en 410 millones de dólares por año son las belgas Jan de Nul y Deme Dredging y las neerlandesas Royal Boskalis Westminster y Van Oord.
De la manera en que quedaron redactados los pliegos se excluyó formalmente a China, pues no podrán competir las empresas cuyos accionistas principales sean los estados soberanos.