jueves, 5 de diciembre de 2024 11:03
El fiscal de instrucción N°2, Laureano Palacios, Distrito Este, finalizó la investigación y elevó a juicio la causa que tiene imputado a un individuo por el delito que raptó y abusó sexual a una mujer.
Los elementos de pruebas reunidos determinaron con el grado de certeza exigidos en ésta instancia que el hombre, identificado de apellido Albarracín (no es familiar de la víctima) es responsable de los delitos de “rapto (hecho nominado primero)” y “abuso sexual con acceso carnal agravado por causar un grave daño en la salud mental de la víctima (hecho nominado segundo)”, en concurso real en calidad de autor. En el marco del proceso judicial la causa pasó por distintas instancias, planteos y oposiciones.
Según la denuncia y la posterior investigación los hechos ocurrieron en febrero del 2022. El individuo y la víctima, de 60 años, se conocieron tras haber realizado transacciones comerciales y el día del hecho la citó para presuntamente charlar en base a lo mismo. La convocó a inmediaciones del Parque de los Niños.
Al lugar llegó la víctima en donde la esperaba Albarracín a bordo de su automóvil. Cuando la mujer subió al rodado el individuo, ya con claras intenciones contra ella, procedió a trabar las cerraduras del vehículo e inició la marcha. Pese a que la mujer en todo momento manifestó sus intenciones de descender del rodado no lo consiguió causa de los actos intimidatorios desplegados por el sindicado, quien de esa forma, se dirigió hacia un motel en Valle Viejo.
Ya en el interior del lugar, siempre manteniendo a su víctima bajo amenazas, el individuo la sometió sexualmente y luego se marchó.
Tras el hecho la mujer radicó la denuncia y se avanzó en la investigación que logró la imputación del individuo.
En base a los elementos de pruebas reunidos, pericias, ADN, testimonios, inspección ocular, pericias psiquiátricas y psicológicas el fiscal imputó del delito.
Según las pericias realizadas por el Cuerpo Interdisciplinario Forense (CIF), la víctima sufrió daño psíquico tras lo vivido, en tanto la pericia realizada al imputado determinó que posee las capacidades necesarias para
comprender sus actos.