jueves, 28 de noviembre de 2024 23:15
Durante la tarde de este jueves 28 de noviembre, se llevó a cabo el cambio de manto de la Imagen de la Pura y Limpia Concepción del Valle, en el Camarín de la Catedral Basílica y Santuario Catedral, en vísperas del inicio de las fiestas marianas.
La prenda es una ofrenda del Servicio Penitenciario Provincial y de la Pastoral Carcelaria a la Virgen, confeccionada en el Taller de María, “en acción de gracias por los beneficios y bendiciones de Dios, alcanzados por intercesión de Nuestra Madre, durante la pandemia, y a lo largo de los 33 años de vida de la Institución en el marco del Año de la Oración”.
La tradicional ceremonia se vivió en un clima de oración y alabanzas a la Madre Morena, con la presencia de los sacerdotes Gustavo Flores y Ramón Carabajal, rector y capellán del Santuario y Catedral Basílica, respectivamente.
Participaron de este momento especial autoridades del Servicio Penitenciario Provincial: el Director General Crio. Gral. (RE) Daniel José Coronel, el Subdirector Prefecto General Julio Barrionuevo, la Directora de Administración, CPN Natalia Tapia Foressi, el Jefe de Seguridad Alcaide Daniel Romero, y el Jefe de Protocolo Of. Ppal. Ramón Sosa, Suboficiales y un interno; en representación de la Unidad de Mujeres, Of. Adjutor Dalma Barrionuevo, en representación de Grupo de Custodia y Traslado Of. Adjutor Acevedo Leonardo, y el diácono Sergio Colósimo, quien acompaña en su tarea pastoral en la cárcel al capellán, padre Dardo Olivera.
Luego de la bendición del vestido y el manto, se procedió a la vestición y, posteriormente, el padre Flores le colocó la corona a la Reina y Señora de este Valle mientras los presentes le cantaban a viva voz.
Concluida la ceremonia, la Sagrada Imagen fue trasladada hasta el Monasterio Inmaculada del Valle de las monjas dominicas, donde permanecerá hasta la mañana de este viernes 29, día en que comenzaremos a vivir días de gracia durante la Novena.
Descripción del manto
El nuevo manto que luce Nuestra Señora del Valle está dedicado por el Servicio Penitenciario Provincial, en acción de gracias por los beneficios y bendiciones de Dios, alcanzados por intercesión de Nuestra Madre, durante la pandemia, y a lo largo de los 33 años de vida de la Institución en el marco del año dedicado a la oración.
En el trabajo realizado con mucha dedicación, oración y amor, el manto lleva simbolizado, en la imagen de San Maximiliano María Kolbe -santo patrono de los privados de la libertad, que dio la vida por un recluso que tenía 8 hijos e iba a ser fusilado-, la entrega y el coraje de dar la vida por el prójimo y por el Cristo Vivo y Redentor.
En el lateral derecho, se bordó una imagen representativa de las manos de Cristo con sus llagas detrás de las rejas, con el texto del Evangelio ‘Estuve preso y me viniste a visitar’. En la parte de atrás figura el escudo del Servicio Penitenciario Provincial.
Una flor de diamela con una piedra de rodocrosita, señala la belleza del Cristo Redentor, de su gloria y la salvación del mundo.
La imagen de la Crucifixión en el Gólgota con los dos ladrones, la Virgen María, María Magdalena y la otra María y Juan, un paisaje de la época de olivos, en las manos el Espíritu Santo y las manos de Dios con sus rayos de AMOR y GLORIA, por el mundo que entrega a su Hijo por la salvación y el perdón de nuestros pecados.
Todo fue realizado a mano, con cristales enviados por una devota de Estados Unidos, cristales y galones donados por fieles que acompañan y colaboran con el humilde Taller de María, y con la buena voluntad de varias mujeres que se dan con fe y mucho amor para hacer posible este bello apostolado.