El fin de semana largo por el Día de la Soberanía Nacional movilizó a 1,4 millones de turistas por la Argentina, que gastaron $196.233 millones en las ciudades que forman parte del circuito turístico nacional. Frente al mismo fin de semana de 2022 (el año pasado estuvo el balotaje presidencial) viajó un 2,3% menos de turistas que gastaron, en conjunto, un 9,8% más en términos reales. Esto se explica porque las familias vienen desembolsando más dinero en recreación y se eligen alojamientos de mayor categoría.
El último fin de semana largo antes del inicio de la temporada de verano se destacó por una potente oferta de encuentros deportivos, culturales y gastronómicos que resultaron un motivo en sí mismo para elegir un destino y viajar.
Cada turista gastó en promedio $70.083 diarios, que a precios reales resulta 23,6% mayor al gasto diario de 2022, mientras que la estadía media fue de 2 días (vs. 2,2 días en 2022). Se hicieron traslados a puntos de corta distancia, lo que permitió estadías de menos tiempo.
Aunque no se cuenta con cifras sobre este fenómeno, de la encuesta cualitativa surge que el resultado hubiera sido mejor si no fuera porque el tipo de cambio, menos favorable con los países vecinos, impulsó más viajes al exterior, Chile y Brasil principalmente.
Entre las ciudades más concurridas estuvieron: Mendoza, Mar del Plata, Cariló, Mar de las Pampas, Tandil, General Belgrano, Carlos Paz, Esteros del Iberá, San Rafael, Salta, Bariloche, Puerto Madryn, El Calafate, Puerto Iguazú, CABA, Concordia y Federación.
En lo que va del año van seis fines de semana largos, donde viajaron 11,2 millones de turistas y gastaron $1,8 billones. Si se compara con 2022, que tuvo una estructura de feriados similar, la cantidad de personas que se movilizaron se mantuvo igual, pero el gasto total creció 18% a precios reales. Incide en este aumento que la primera parte de aquel año continuaba la cuarentena en varios distritos, por lo que la gente eligió destinos cercanos y fue prudente en las actividades compartidas.
Catamarca
La provincia vivió un importante repunte turístico, con un total de 21.000 visitantes que llegaron a disfrutar de sus maravillas naturales y culturales. La ocupación en la capital fue de 75%, mientras que en el interior de la provincia alcanzó un impresionante 89%. Además, los prestadores del sector registraron una ocupación del 98%, lo que refleja la alta demanda en los destinos más populares.
Los visitantes, en promedio, se quedaron 3 noches, generando un impacto económico de aproximadamente $4.600.000.000. El Pueblo Perdido de la Quebrada, con sus propuestas de astroturismo se destacó como uno de los principales atractivos, ofreciendo tres noches de exploración del cielo catamarqueño. También se llevaron a cabo charlas sobre la biodiversidad local, donde los asistentes pudieron aprender sobre la flora nativa de la región.
Entre otros puntos concurridos estuvieron las Estancias de Aconquija, El Portezuelo y el Campo de Piedra Pómez, tres joyas naturales que dejaron admirados a los turistas. La provincia sigue consolidándose como un destino perfecto para quienes buscan aventura y contacto con la naturaleza.