La modelo Araceli Torrado pidió una medida de restricción y un allanamiento a los dispositivos de su expareja David Nalbandian en su declaración en el marco de la causa contra el extenista por hostigamiento, después de que el deportista reconociera haber instalado una cámara oculta en el departamento que compartían en la Ciudad de Buenos Aires y resaltó que «es un alivio» ser escuchada por el Poder Judicial.
«Fue un buen paso el hecho de poder hablar y declarar. Estoy esperándolo haces meses, desde que hice la denuncia a mitad de año. Siento un poco de alivio al saber que se ha hecho público y que nos han prestado atención de parte de la justicia», dijo Torrado a Télam, luego de declarar durante dos horas en el Penal Contravencional y de Faltas de la Ciudad 30, ubicado en la calle Beruti 3345 en el barrio porteño de Palermo.
Esta instancia judicial se dio luego de que la Sala 3 de la Cámara de Apelaciones en lo Penal y Contravencional revocara la resolución que archivó la causa contra su expareja Nalbandian, tras un recurso de apelación interpuesto por el abogado de Torrado, Martín Olari Ugrotte.
Además, los jueces ordenaron que la denunciante sea escuchada, reconociendo su derecho a continuar impulsando la investigación.
«Espero que la justicia ahora que está actuando no tarde mucho más. Queremos el allanamiento a los dispositivos. Me quiero quedar tranquila que no está en mano de una persona depravada»Araceli Torrado«Hoy volvimos a insistir en la medida de restricción. En una de mis últimas comunicaciones con él me dijo que me iba a buscar. Tuve que mudarme a las corridas y a las escondidas», compartió la joven de 30 años.
Además pidió un allanamiento de los dispositivos de Nalbandian ya que «me filmó y grabó por bastante tiempo como para tener desnudez y privacidad de mi persona, familia, amigas».
«Me generó pánico y ansiedad saber que él me tiene en su celular o en alguna aplicación y no pude tener la respuesta de dónde queda mi intimidad, mi imagen», expresó.
Este pedido se dio después de que el extenista reconociese haber instalado una cámara oculta en el departamento que compartían en CABA.
Olari Ugrotte informó a esta agencia que entre este martes y miércoles el Poder Judicial va a resolver sobre los pedidos de su representada.
Atención, contención y asesoramiento en situaciones de violencia de género
Por llamada gratuita las 24 hs Línea 144 Por WhatsApp 11-2771-6463. Por mail a [email protected] Descargando la app Torrado también aclaró que la instalación de la cámara en su habitación personal «no fue el único hecho», sino que «fueron incontables las situaciones de acoso, hostigamiento y de acoso sexual que tuve que pasar».
«Cuando corto la relación, en vez de entender, él quería seguir y acostarse conmigo a la fuerza», graficó.
A su vez compartió que esta situación la perjudicó laboralmente ya que tuvo que «esconderse» porque a los «eventos de trabajo muchas veces iba o se invitaba solo».
Consultada sobre si volvió a tener comunicación con Nalbandian, informó que lo tiene «bloqueado de todos lados» en su teléfono y redes sociales, pero indicó que «se había estado comunicando con amigas o ‘stalkeandolas’ y viendo lo que yo hacía», al tiempo que a una de ellas «la empezó a hostigar para preguntarle si estaba con alguien más».
Olari Ugrotte aseguró que la modelo fue asistida por la Oficina de Asistencia a la Víctima y al Testigo desde finde de julio de este año.
En ese momento, contó que había comenzado una relación con Nalbandian en septiembre de 2022 y que los primeros meses habían sido buenos, mientras sus encuentros se alternaban entre su domicilio en Rosario y el domicilio del extenista en la provincia de Córdoba.
Torrado encontró una cámara de vigilancia con capacidad para transmitir en tiempo real oculta en la ventilación del departamento que compartía con Nalbandian, quien luego le confesó ser el responsable de ese dispositivo. Sin embargo, indicó, el vínculo comenzó a tensarse cuando ella decidió mudarse a Buenos Aires.
Torrado narró en la conversación con la funcionaria judicial que fue Nalbandian quien le propuso alquilar a su cargo un departamento para compartirlo, y que él comenzó a hostigarla y tratar de controlar su vida social, pretendiendo incluso, según su testimonio, «intentar tener sexo, de manera brusca, con situaciones forzadas» durante un viaje de la pareja a los Estados Unidos.
En junio de este año, la joven encontró una cámara de vigilancia con capacidad para transmitir en tiempo real oculta en la ventilación del departamento que compartía con Nalbandian, quien luego le confesó ser el responsable de ese dispositivo, a través de una conversación por Whatsapp.
«Espero que la justicia ahora que está actuando no tarde mucho más. Queremos el allanamiento a los dispositivos. Me quiero quedar tranquila que no está en mano de una persona depravada», concluyó Torrado.