Juntos por el Cambio acusa al oficialismo de querer dilatar la nueva normativa. Desde el Frente de Todos responden que quieren tratar en el recinto alquileres con créditos UVA.
El oficialismo en el Senado dio un giro en su estrategia y tras estancarse la negociación con la oposición buscará ir con un proyecto propio de la Ley de Alquileres para modificar la media sanción de Diputados, al tiempo que ratificó su decisión de mantener en pie el pliego de Ana María Figueroa, la jueza que debe decidir en dos causas que vinculan a Cristina Kirchner.
Frente a esta jugada, Juntos por el Cambio acusó al kirchnerismo de tratar de «dilatar de alguna manera la discusión por la ley de alquileres». Si bien dio luz verde para convocar a la comisión de Legislación General en el temario se incluyó no sólo la propuesta aprobada esta semana en la Cámara baja sino también otras iniciativas que estaban en el Senado.
Para la oposición, el Frente de Todos sufrió «la presión social» y por eso accedió a tratar el tema en comisión. «Algunos de ellos quieren meter alguna modificación a la ley y así dilatar para que vuelva a Diputados», apuntó a Clarín una senadora opositora, quien aclaró que en el oficialismo «todavía no están unificados en el criterio de cómo avanzar con la ley».
Lo que sí ratificó la legisladora es que el kirchnerismo «sólo quiere avanzar con los jueces». La referencia tiene que ver con la intención del Frente de Todos de condicionar el debate de la ley de alquileres a la aprobación de 75 pliegos judiciales, entre los que están el de Ana María Figueroa, la camarista que este mes cumplió 75 años y que debería jubilarse pero se mantiene en su cargo porque debe decidir en causas vinculadas a la vicepresidenta.
En el bloque que comanda José Mayans rechazaron esa versión y acusaron a Juntos por el Cambio de «mentir». Es cierto que hay visiones diferentes sobre la problemática de los alquileres dentro del Frente de Todos, pero anticiparon que el martes irán con una propuesta propia para modificar el proyecto aprobado en Diputados con la excusa de que «sea más equilibrado para las partes».
También rechazaron que sólo haya interés en aprobar los pliegos judiciales como acusó la oposición y revelaron que en las negociaciones para convocar a una sesión se le ofreció a Juntos por el Cambio la posibilidad de bajar el pedido que extiende por 5 años el mandato de Figueroa, pero que la oferta fue rechazada con el argumento de que la designación de jueces y fiscales ya le corresponde al próximo gobierno.
Esta posición alteró más los ánimos en el Senado porque en el oficialismo entienden que la maniobra roza lo inconstitucional. Aunque en rigor suele ser una mala costumbre y para muestra hay que recordar que a poco de asumir en 2019, el presidente Alberto Fernández retiró más de 200 pliegos de jueces que habían sido propuestos durante el gobierno de Mauricio Macri.
Lo cierto es que la negociación para que el Senado vuelva a sesionar (sólo hubo una reunión en el recinto en lo que va del año) se convirtió en una suerte de círculo vicioso porque Juntos por el Cambio quiere un temario consensuado con propuestas de baja intensidad política, pero el oficialismo tiene no sólo estos 75 pliegos que debe aprobar en el recinto sino también otro paquete de 30 jueces y fiscales que envió el Ejecutivo, algunos cuestionados por su cercanía con Axel Kicillof y Eduardo «Wado» de Pedro.
La oposición quiere que estos pliegos no sean incluidos en el temario y desde el Frente de Todos responden que eso es imposible. «Sólo se le da entrada a los pliegos que envió el Presidente para que pasen a la comisión de Acuerdos y después tiene que ser tratados en el recinto, no entiendo la posición de Juntos por el Cambio», protestó, con un tono indignado, un importante senador peronista.
Lo que dejó en claro este legislador es que el kirchnerismo no va a bajar el pliego de Figueroa, ya que es una jugada táctica para la estrategia judicial de Cristina Kirchner tanto en la causa Hotesur-Los Sauces como en la del Memorándum con Irán. Entienden que no será lo mismo una posible apelación ante la Corte Suprema con un fallo unánime contra la vicepresidenta que una resolución dividida.
Las fuentes que en junio le anticiparon a este diario que el Senado no iba a sesionar hasta después de las PASO, ahora comienzan a alertar que la Cámara alta recién volvería a juntarse en el recinto después de la elección general de octubre, un hecho que sería inédito, más allá de tratarse de un año atravesado por el calendario electoral.
Los proyectos de reforma de la Ley de Alquileres que serán tratados en el Senado
En la convocatoria de Legislación General, que en realidad será un plenario con Presupuesto, primero se designarán a las autoridades de la comisión, pese a que pasaron 9 meses del año y se está más cerca del final que del comienzo del período ordinario del Congreso.
Luego se pasará al tratamiento de la reforma de la Ley de Alquileres que se aprobó en Diputados aunque también se incluirán otros proyectos de senadores oficialistas y de la oposición.
Se trata de seis iniciativas que en su mayoría coinciden en el plazo de los contratos de locación, el período de ajuste y la fórmula a aplicarse. Incluso coinciden con lo aprobado en Diputados que los convenios de alquiler sean de dos años.
La diferencia más importante está en que los ajustes serán semestrales cuando el proyecto que tiene media sanción plantea un piso de 4 meses y también ordena que la actualización del valor del alquiler se regule por una combinación de índices cuando lo resuelto por los diputados deja en libertad a las partes.
Desde el oficialismo confirmaron que la intención es tratar la reforma de la Ley de Alquileres con el proyecto de ley que promueve atender la situación de los deudores de créditos hipotecarios UVA, que también tiene la media sanción de la Cámara baja.